Ha llegado el último día, el final de nuestra experiencia en Calabria, y a modo de despedida, hemos asistido a una reunión convocada por el equipo directivo del instituto Majorana.
Entre los asistentes se encontraban la directora, la vicedirectora, el jefe de estudios, la profesora de la especialidad agroecológica, el coordinador de proyectos educativos y la profesora de inglés.
Los temas tratados han versado sobre los temas educativos italiano y español, sus diferencias y semejanzas, la integración del alumnado y la búsqueda de soluciones ante el absentismo escolar, las posibles salidas profesionales de las carreras técnicas, el desarrollo de programas Erasmus + y la metodología de la enseñanza de las lenguas y del dibujo técnico y las TIC para la preparación de módulos o enseñanzas universitarias.
Además de estos asuntos, han surgido otros de interés como la similitud que existe en nuestras regiones a nivel socio-económico y, en concreto, cómo estos docentes abordan las enseñanzas agrónomas en el centro.
De igual manera, hemos presentado nuestro proyecto, hemos explicado sus características y los pasos que hemos tenido que llevar a cabo para su aprobación, porque ellos están interesados en solicitar uno en un corto plazo de tiempo.
Al final de la mañana nos han obsequiado con una visita cultural del Museo Diocesano del Códex bizantino en la ciudad de Rossano. Escrito en griego, es uno de los más antiguos que se conservan.
Posteriormente, Antonio Gallo nos ha llevado a degustar los productos típicos de la Calabria, terminando nuestra jornada con otra interesante visita, en este caso, al Castillo Ducal de Corigliano, fortaleza militar del año 1073 y propiedad del baroni Campagna. Se encuentra situado en un enclave que domina toda la montaña calabresa.
En conclusión, pese a las dificultades encontradas a lo largo de estos días, consideramos que nuestra experiencia ha sido muy enriquecedora.
